La Demarcación de Costas ha comunicado por escrito al ayuntamiento de Tapia de Casariego que no le compete actuar en la zona de la piscina de agua salada, aunque tiempo atrás había asegurado lo contrario. En mayo de 2019 se produjo un desprendimiento de rocas en el talud natural de la piscina, que obligó a cerrarla al baño por seguridad de los usuarios. Cuando se comunicó esta situación a la Demarcación de Costas en Asturias, ésta adquirió el compromiso de abordar la obra en cuanto tuviera disponibilidad presupuestaria. Pero un informe de la Abogacía General del Estado asegura que corresponde a los ayuntamientos actuar en los acantilados de las playas y zonas de baño. Mientras tanto, el ayuntamiento de Tapia considera que el desprendimiento de rocas se produjo en una zona que no forma parte de la concesión de 1018 metros cuadrados de dominio público marítimo terrestre.
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