«Receptiva y dispuesta a estudiar nuestras sugerencias» es como ha encontrado Carmen Mozo, gerente del camping Playa de Tapia de Casariego, a la viceconsejera de Turismo, Graciela Blanco, con la que tuvo oportunidad de reunirse ayer. Entre otros asuntos, pudieron hablar sobre cómo ha afectado la pandemia del coronavirus al sector: más al principio de temporada, cuando se declaró el brote de Covid-19 en la comarca de A Mariña. Y ahora en agosto, han visto mejoradas las expectativas. Quizá porque cada parcela es «espaciosa, de 90 a cien metros» y porque «estamos muy pendientes de mantener mucha higiene y limpieza». Además, en las zonas comunes, «todo el mundo respeta el uso de mascarillas y el distanciamiento», explica.
También han tratado sobre las autocaravanas, porque «con ellas se vende la idea de libertad para llegar donde tú quieras, pero aquí no tenemos infraestructuras para eso», explica. Y así, «se dan situaciones peculiares, con zonas abarrotadas de autocaravanas y aparcadas en cualquier sitio». Cuando en los campings «hay sitio para que estos vehículos pernocten por un precio asequible- 2 personas y una autocaravana son 20,50 euros/noche, con derecho a parcela, a ducharse, a vaciar aguas sucias, a sacar mesas y sillas, etc». El área de autocaravanas de Tapia, este verano, «ha estado siempre por encima de sus posibilidades» y por eso se las ha visto estacionadas «en sitios donde no se puede estar».