El ayuntamiento de Tapia de Casariego deberá reparar el busto de Concha Espina que, tras un acto vandálico que se produjo a finales de julio, apareció con el «cráneo fracturado» y con una mascarilla puesta. El busto de la escritora se había inaugurado en agosto de 2019, con motivo del 150º aniversario de su muerte.
También tendrá que arreglar los juegos infantiles del parque que, en esta última quincena, resultaron dañados. Lo mismo que los carteles del parque y los dispensadores de hidrogel.