El alcalde de Boal, José Antonio Barrientos considera que el 2017 fue positivo para las infraestructuras del concejo: la consejería está terminando la carretera entre El Gumio-La Garganta, muy transitad, y otras de menor envergadura, mientras el ayuntamiento se ocupa de ofrecer servicios básicos en el medio rural. También se renueva parte del alumbrado público para abaratar el coste por consumo. El alcalde sí cree necesaria la construcción de una depuradora para el Valle de Armal, presupuestada en 4,5 millones de euros, que la Junta de Saneamiento prevé acometer en 2019.