En el cementerio de Villapedre, en Navia, ha tenido lugar este miércoles, la segunda jornada de excavación para intentar localizar los restos óseos de dos vecinos del concejo de Navia: Manuel Pérez Méndez, «El Pequeno», natural de Vigo, y José Pérez, natural de Bárzana, asesinados por los golpistas de la zona el 12 de agosto de 1936. Ayer martes, se encontraron en el área de trabajo, el espacio bajo tierra comprendido entre el Panteón del que fuera alcalde de Navia y la capilla, restos óseos que parecen corresponder con niños y adolescentes enterrados en esa zona, posiblemente no bautizados o quizá procedentes de algún orfanato, según ha explicado la antropóloga forense, que intenta datar esos restos, Natasha Sharckick, que explica la dificultad de este proceso. Serxo Castro, director del trabajo arqueológico, explicaba la importancia de tratar con restos humanos, por los que la familia espera. Marco González, vicepresidente de la Asociación para la Recuperación de la Memoria Histórica, contaba cómo se ha descartado una de las hipótesis con la que se inició el trabajo, y es que estos dos vecinos asesinados hubiesen sido enterrados en una caja de madera. Y señala que, cuando se encuentren los restos óseos que puedan corresponder con los de dos varones de unos 30 años, se hará un análisis genético- si la calidad de los restos lo permite- para intentar identificarlos. En cualquier caso, en estas últimas horas se han localizado restos óseos cuyo tamaño corresponde con persona adulta. Xosé Miguel Suárez, autor de “Como augua de torbón. Guerra civil y represión franquista el estremo noroccidental de Asturias”, manifestaba la esperanza de que su libro sirva, como en este caso, para que las familias puedan pedir la localización de restos de sus familiares asesinados, como ha sido el caso. Y, Juan José Pérez, nieto de «El Pequeno», que seguía con atención los trabajos también en esta jornada, recordaba emocionado qué supondrá para la familia recuperar los restos de su abuelo.

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