La Agencia de Sanidad Ambiental y Consumo realizó el pasado año 8.803 visitas de control en 7.905 establecimientos relacionados con la preparación, distribución y consumo de alimentos, con el fin de proteger la salud de la población, reducir riesgos y garantizar la seguridad en los mercados. Rosa Urdiales, directora de Agencia de Sanidad Ambiental y Consumo (ASAC) ha presentado este viernes, la memoria anual de este organismo.
En el departamento de seguridad alimentaria, los controles se realizan en los establecimientos inscritos en los registros que gestiona la ASAC: el de empresas alimentarias de establecimientos minoristas, que cuenta con 10.074 entidades (un 15% más que en 2016), y el registro general sanitario de empresas alimentarias y alimentos de ámbito nacional, con 2.253. El equipo desarrolla los programas oficiales de seguimiento, basados en riesgos, que incluyen todos los sectores y fases de la cadena, excepto la producción primaria.
En los 15 mataderos operativos se inspeccionaron el año pasado 22.151 toneladas de carne de 54.729 piezas de vacuno, 13.848 pequeños rumiantes (ovejas y cabras), 45.963 cerdos, 3.605 equinos y 2.233 aves. Esta última cifra, que supone un incremento del 20% respecto a 2016, se ha multiplicado por 100 en los últimos cuatro años. Además, dentro del Plan Nacional de Investigación de Residuos y de los programas de seguridad química y microbiológica de alimentos se recogieron y analizaron 593 muestras.
También se gestionaron 269 alertas alimentarias y 1.524 informaciones. Asimismo, se retiraron del mercado 38 productos, fundamentalmente de origen animal, y se tramitaron 238 denuncias de consumidores relacionadas con la seguridad de los alimentos.
Control de riesgos
El área de sanidad ambiental vigila los riesgos para la salud y gestiona los registros de actividades y establecimientos. Este departamento tiene inscritos 104 establecimientos y servicios de biocidas, 447 instalaciones de riesgo de legionela, 537 centros de bronceado, 181 piscinas de uso público, 341 abastecimientos, 971 captaciones de agua con 1.361 depósitos y 66 estaciones de tratamiento de agua potable.
Para su control, se analizaron 798 muestras de agua destinada al consumo, se llevaron a cabo 315 inspecciones en piscinas y se evaluaron 508 muestras. También se efectuaron 550 controles en instalaciones de riesgo de legionela y se recogieron 345 muestras. Además, se ejecutaron 264 inspecciones en centros de bronceado, 66 en establecimientos y servicios de biocidas y 42 en campamentos turísticos.
Laboratorio de Salud Pública y área de consumo
El Laboratorio de Salud Pública realiza su actividad en ámbitos relacionados con la contaminación hídrica, ambiental, de alimentos y residuos veterinarios. En 2017, se procesaron 4.014 muestras y se realizaron 25.538 análisis. Una de las acciones más destacadas fue la colaboración con el Hospital Universitario Central de Asturias (HUCA) para el análisis microbiológico de los platos preparados y la supervisión de la higiene de las superficies de la cocina del centro sanitario.
En el área específica de consumo, se atendieron 1.553 denuncias, se ejecutaron 13 campañas de control de mercado y 1.721 inspecciones. También se ejecutaron 505 arbitrajes, la mayor parte en el sector de las telecomunicaciones; se gestionaron 2.798 notificaciones de productos inseguros y se retiraron 82.423.
En las actividades de educación para el consumo, desarrolladas a través de la red de centros de formación, participaron 19.584 personas, lo que supone un incremento del 15% en comparación con 2016.
En cuanto a los procedimientos sancionadores, se tramitaron 497 expedientes que conllevaron multas por un valor de 541.362 euros. En concreto, 155 casos corresponden al área de consumo, 227 están relacionados con el uso del tabaco, 114 con la seguridad alimentaria y uno con la sanidad ambiental.