La Universidad de Oviedo está desplegando la primera red sísmica submarina para tener datos fiables sobre los terremotos que afectan a la Cornisa Cantábrica. Los sismógrafos, algunos a más de 4.500 metros de profundidad permitirán por primera vez, tener datos fiables sobre la actividad sísmica frente a las costas del Occidente asturiano. Carlos López, Decano de la Facultad de Geología de la Universidad de Oviedo, explicaba en estos términos hace algunas fechas, cómo se desarrolla el proyecto.
Y la profesora Gabriela Fernández Viejo, a bordo del buque oceanográfico Sarmiento de Gamboa, explicaba así el objetivo y cómo se estaba haciendo este trabajo.