El Centro de Apoyo a la Integración (CAI) de Penlés continúa trabajando en línea con los 20 usuarios del centro. Lo viene haciendo desde el pasado 16 de marzo, a través de una red de teletrabajo, en el que las educadoras, desde sus domicilios, siguen ofreciendo los apoyos a los usuarios adaptándose a las nuevas circunstancias y facilitando el día a día, tanto a los discapacitados como a sus familias.
Durante la primera semana de confinamiento, desde el CAI se ha informado de la situación de la pandemia y los protocolos a seguir, en coordinación con la Unidad de Recursos para personas con Discapacidad de la Consejería de Derechos Sociales y Bienestar, el equipo territorial de Servicios Sociales del Área II, la Concejalía de Servicios Sociales del Ayuntamiento de Cangas del Narcea. Así mismo se ha dado unas pautas generales, que consiste en crear unas rutinas, para facilitar la vida de los usuarios en el domicilio. También se les ha facilitado un número de teléfono móvil al que pueden llamar en caso de necesitar información, asistencia o ayuda. En la segunda semana, y adaptándose a los medios de los que disponen los domicilios, las cinco profesionales del CAI (directora/psicóloga, educadoras, formadoras y auxiliares) se han puesto en contacto con usuarios y familiares para trasmitirles las rutinas y pautas de manera individualizada para cada uno de ellos. Estas actividades tienen como finalidad mantener el buen estado físico, psicológico y anímico del usuario, adaptándose a los cambios que pudiera afectar el encierro a su situación personal.
En dicho seguimiento, «intentamos solventar los problemas, dudas y necesidades que les vayan surgiendo», explicó la directora del CAI de Penlés, Ana Rosa Arce, quien explicó que, «se derivarán a otros organismos si la atención queda fuera de nuestras posibilidades o competencias». Las intervenciones constan de: información relativa a la situación (protocolos, legislación, información de organismos que pueda ser de interés), información sobre pautas de actuación generales y especificas a las características de cada usuario, elaboración y traslado de rutinas adaptadas a sus necesidades, actividades a realizar en dichas rutinas y cómo llevarlas a cabo en casa (fichas, material didáctico, sugerencias…), seguimiento tanto de usuarios como de sus familias, para facilitar apoyos necesarios durante el confinamiento y detección de posibles necesidades, con el apoyo y orientación psicológica necesaria. Estas personas con discapacidad y sus familias «están superando el reto con nota, son unos luchadores acostumbrados en su vida diaria a esforzarse para superar cada reto», aseguró Carmen López Martínez, concejala de Salud Pública, Igualdad, Mujer y Servicios Sociales, quien también quiso felicitar a las trabajadoras del CAI, «por el gran esfuerzo que están haciendo para seguir atendiendo a cada uno de los usuarios».
Las trabajadoras del centro llaman un mínimo de una vez a la semana por vía telefónica, aunque el contacto es más frecuente a través de WhatsApp, correo electrónico o Facebook. En algunos casos puntuales se interviene telefónicamente más de una vez a la semana. Cada siete días se intenta variar las actividades, con distintas temáticas para trabajar los objetivos propuestos. En este sentido, y además de las propuestas que se les aporta en las comunicaciones, en la página de Facebook (Cai Penlés), se aportan más propuestas de actividades variadas para implementar en casa, intentando adaptarse a los materiales que tienen en el domicilio, proponiendo distintos niveles de complejidad. Este es un medio además que se utiliza para las relaciones sociales, el contacto con el resto de sus compañeros y con la propia comunidad, en la que además se recibe feedback.
