Luis Laria, presidente de Cepesma, ha decidido ceder los calamares gigantes de su propiedad al ayuntamiento de Valdés. Hemos hablado sobre este asunto con el portavoz de los concejales no adscritos en el ayuntamiento de Valdés, José Vallejo; con el alcalde socialista Simón Guardado y con el presidente de la asociación Más Luarca Valdés.
El presidente de Cepesma, Luis Laria cree que esta decisión personal supone el final de una etapa: ha decidido cederlos a todos los ciudadanos de Valdés, bajo la tutela del ayuntamiento, quien dispone así de una herramienta para exigir al Principado que el Museo sea realidad de una vez por todas.
El portavoz de los concejales no adscritos de Valdés, José Vallejo, pide a Luis Laria que reflexione y rectifique la decisión “engorrosa” de ceder esos calamares gigantes al ayuntamiento, espera que continúe vinculado al Museo del Calamar porque sin Laria, “nacería muerto”. Habla Vallejo de “años de dejadez e ineficacia” tanto del ayuntamiento de Valdés como del gobierno regional y pide al presidente del Principado, Javier Fernández, que tome las riendas de este asunto.
El alcalde de Valdés, Simón Guardado, señala que “no habrá problema” con aceptar la cesión de los calamares gigantes, si esos calamares se ligan al futuro desarrollo del Museo. Considera que la gestión podría ser “pública, con participación del ayuntamiento de Valdés y del Principado de Asturias”, aunque lamenta “la ausencia de Laria como alma máter del proyecto de Museo”. El alcalde explica que mantendrá un encuentro con el consejero de Infraestructuras y Medio Ambiente para estudiar cómo afrontar esta nueva situación, “hablar del nuevo escenario, cómo se presenta y a partir de ahí, fijar plazos”.
Por su parte, el colectivo Más Luarca Valdés, que preside Tino Ron tras manifestar “absoluto respeto” con la decisión libre que ha tomado Luis Laria de ceder los calamares gigantes de su propiedad “a los vecinos de Valdés a través de sus representantes en el ayuntamiento”, también critica la “dejadez absoluta de las instituciones” respecto al Museo del Calamar Gigante, un proyecto “cuya magnitud ninguna corporación del ayuntamiento tuvo la capacidad ni política ni intelectual de llegar a comprender en una mínima parte”. Ron pide para Laria y para el Cepesma, un “papel primordial”, respecto al futuro del Museo.