La Consejería de Sanidad llama cada año a 65.000 mujeres de 50 a 69 años de edad a participar en el programa de cribado poblacional de cáncer de mama, un plan implantado en todo el Principado con garantías de calidad en el diagnóstico, tratamiento y seguimiento de la paciente.
Coincidiendo con la víspera del Día Mundial dedicado a la lucha contra el cáncer de mama, el más frecuente entre las mujeres de todo el mundo, la Dirección General de Salud Pública recuerda que participar en programas públicos, universales y gratuitos como el que desarrolla el Servicio de Salud del Principado (Sespa) es la medida más eficaz para la detección temprana de la enfermedad.
Según los últimos estudios, las mujeres a las que se les detecta un tumor con esta herramienta tienen un 27% más de posibilidades de que se encuentre en una fase temprana y no haya causado afectación ganglionar, lo que determina un mejor pronóstico.
Este programa no evita la dolencia, pero permite detectarla en una fase inicial, cuando la probabilidad de supervivencia es mayor. El pronóstico está directamente relacionado con el tamaño y la extensión del tumor en el momento del diagnóstico. También se consigue que los tratamientos sean menos agresivos, que las pacientes tengan mejor calidad de vida y que más mujeres puedan curarse.
En Asturias, se diagnostican anualmente unos 600 nuevos casos de este cáncer. Aunque tiene una alta incidencia, la principal causa de muerte en mujeres es la enfermedad cardiovascular. La edad es un factor de riesgo importante, de tal forma que más de la mitad de los casos se producen en mayores de 60 años.
A la cola de Europa en número de casos
Los estudios revelan que siete de cada ocho mujeres nunca padecerán un tumor de estas características y que el Principado se encuentra a la cola de Europa en número de casos, si bien en los últimos años se ha detectado un leve incremento debido a los cambios en el patrón reproductivo, con un retraso de la edad en el primer embarazo y una disminución del número de hijos. Los expertos recomiendan mantener la lactancia materna como elemento protector frente a la enfermedad.
El número de mujeres que fallecen anualmente por esta causa en Asturias se sitúa aproximadamente en 200. Esta cifra ha descendido en los últimos años gracias a la mejora de los tratamientos y al programa de detección precoz. Actualmente, la supervivencia es de más del 80% a los cinco años del diagnóstico y supera el 60% a los diez.
La Consejería de Sanidad recomienda a todas las mujeres que mantengan hábitos saludables de vida como un peso adecuado, bajo consumo de alcohol, ejercicio físico y una alimentación equilibrada para prevenir esta patología.
En los programas de prevención y tratamiento que se llevan a cabo en la comunidad intervienen una decena de especialidades médicas y de enfermería relacionadas con el diagnóstico y todas las fases del tratamiento de los casos, que incluyen la reconstrucción completa de la mama si ha habido mastectomía. Todas las áreas sanitarias disponen de programas de detección temprana de las lesiones y cuenta con equipos de cirugía para las intervenciones.