Después de once meses ha quedado resuelto el problema de transporte del CAI Villamil de Serantes (Tapia de Casariego) que gestiona la asociación Fraternidad. Durante este tiempo, la consejería de Bienestar Social ha estado abonando a la empresa de autobuses adjudicataria del servicio de transporte 12.700 euros mensuales aunque realizaba sus viajes sin pasajeros porque era el autobús de la asociación Fraternidad quien, en realidad, transportaba a los usuarios al CAI. Desde ayer, la consejería ha vuelto a conceder a Fraternidad el servicio de transporte de los usuarios del CAI.
